Los Protocolos de los Sabios de Sión - Parte VII

PARTE VII

3- “Los Protocolos de los Sabios de Sión” en  Alemania



3.1

Decepcionando a Ratschkowsky, Nilus y la Okhrana (Policía Secreta Rusa), el libro antisemita, en el periodo de la preguerra tuvo escaso éxito.

Recién al final del año 1919, “Los Protocolos” adquirieron una enorme fama.

Éste éxito se debió especialmente a dos rusos fanáticos que se habían establecido en Berlín : Pyotr Nikolayevich Schabelski-Bork y Fyodor Viktorovich Vinberg (en alemán Pjotr Nikolajewitsch Schabelski-Bork und Fjodor Viktorowitsch Winberg).

Los dos habían abandonado Rusia al comienzo de la Guerra Civil y se incorporaron a la misma asociación en que actuaba quien fue el primer editor en alemán de “Los Protocolos” :

Ludwig Müller alias Müller Von Hausen alias Gottfried Zur Beek, capitán retirado y editor de la revista antisemita "Auf Vorposten" (La Avanzada).

La unión entre éstos tres oscuros personajes , “medio locos” y casi criminales tuvo graves consecuencias.

Ellos iniciaron una agitación antisemita de una mortífera intensidad, totalmente nueva en la parte occidental de Europa.

En su libro "Krestny Put" (“El Camino de la Cruz”), Vinberg publica un compendio de sus ideas políticas : era absolutamente necesario librarse de alguna forma de los judíos.

Dado que lograr ésto era prácticamente imposible en una democracia, Vinberg llama “a los líderes naturales del mundo” a tomar el poder e imponer a los “rebaños de monos” una dictadura.

Era urgente unir a las naciones en un “frente común” contra “La Conspiración Judía”.

Según Vinberg :

Los enemigos de Alemania (Inglaterra y Francia) habían sido siempre las “plazas fuertes” de “Los Sabios de Sión”.

Ya en el Siglo XVIII, pagaron los “Sabios de Sión” a hombres como Rousseau,
Voltaire, Diderot und D'alembert, para arruinar a Francia.

Más recientemente, ellos pagaron a los escritores Tolstoi y Gorki para debilitar a Rusia.

La Revolución Francesa y la Rusa de 1917 también fueron planeadas por “Los Sabios de Sión”.

También la 1° Guerra Mundial fue un trabajo de “los sabios”, quienes articularon la política exterior de británicos y franceses.

La última esperanza de salvación sería una alianza entre la “verdadera” Rusia y la “verdadera” Alemania bajo dictaduras de derecha.

El nuevo slogan sería “Alemania y Rusia sobre todas las cosas y sobre todo el mundo”.

El de Vinberg no era realmente como para tomarlo como un serio programa de gobierno ya que ni los extremistas de derecha rusos deseaban pedir ayuda a Alemania para la restauración del Zarismo, ni eran los partidarios de la Extrema Derecha Alemana (salvo Ludendorff) eran tan poco realistas como para abogar por la restauración de los Hohenzollern (familia real derrocada tras la derrota alemana en la 1° Guerra Mundial).

Sin embargo, había un punto, en que Vinberg tenía razón : que los Protocolos podrían ser mucho más populares en Alemania que en cualquier otro país de Europa.

Los judíos, en efecto, para muchos grupos de ciudadanos alemanes habían llevado a Alemania a la catástrofe, siendo los responsables de la derrota militar de “Las Potencias Centrales”.

(N. del T. : Las “Potencias Centrales” era la alianza de alemanes y austrohúngaros que fue derrotada en la 1° Guerra Mundial)

La infame revista antisemita "Vorposten" suministró un “perfecto informe” para esos grupos :

“La bandera azul y blanca de la gente judía sumada a la “roja-sangre” de la masonería “de alto grado” escocesa ¡ han logrado una victoria temporal !”.

“Los tronos de los Romanovs, Habsburgos y Hohenzollerns permanecen “abandonados” y Alemania gime ante la tiranía de los “Concejos de Soldados y Obreros”.

Ya en el año 1919, escribió cierto profesor Dr. F. Wichtl, dos largos tomos de “pseudo-historia” diciendo que los alemanes fueron derrotados por una conspiración conjunta de masones y judíos.

Luego, “informó” al sorprendido lector que Rusia e Inglaterra estaban en manos de los “Conspiradores Judeo-Masónicos”.

Trotsky era un agente de los grandes operadores financieros judíos y “emisario del rabinato”. (N. del T.: Uno de los Jefes de la Revolución Comunista de Rusia).

El futuro dominio del mundo por los judíos se deberá a la ayuda del Rey de Inglaterra Jorge v (George v).

Un país en el cual semejante exuberante cantidad de insensateces eran leídas y creídas con entusiasmo, estaba en los hechos, preparado para la llegada de “Los Protocolos de los Sabios de Sión”.

A mediados de Enero de 1920, llegaron “Los Protocolos de los Sabios de Sión” (en idioma alemán) a Alemania, publicados por la misma editorial que imprimía la revista antisemita "Auf Vorposten".

El editor era el ya mencionado Ludwig Müller (ó Müller Von Hausen ó G. Zur Beek).

Quien proporcionó financiación al libro antisemita fue el Príncipe Otto Zu Salm-Horstmar.

¡ Otto Zu Salm-Horstmar había conseguido dinero de miembros de la ex Casa Real Prusiana de los destronados Hohenzollerns !

La alegría de los “Príncipes de Europa” por la publicación del libro antisemita estaba totalmente fundamentada.

El libro estaba dedicado “a los príncipes de Europa” y tenía un retrato del “Gran Elector” (N. del T.: era en Alemania quien decidía quien sería el próximo Rey), con la frase en latín : “exoriare aliquis nostris ex ossibus ultor!”

(N. del T. : Es una frase latina de Virgilio: “deberá salir de mis huesos quien logre vengarme”. “saldrá de de mis huesos” = “saldrá de mi familia”).

El Príncipe Joachim Albrecht de Prusia (Joaquín Alberto) solía regalar ejemplares del libro antisemita al personal directivo de los hoteles que visitaba, y también a algunos empleados.

(N. del T.: El Príncipe Joachim Albrecht de Prusia era un militar y músico perteneciente a la dinastía Hohenzollern).

El ex Kaiser (Emperador) Wilhelm II (Guillermo II), siempre decía que su caída fue un “trabajo” de los “Sabios de Sión”.

En una entrevista en el año 1921, dijo Wilhelm II que, por desgracia, él había subestimado el poder de la judería internacional, y que su única salvación hubiera sido ajusticiar antes de la guerra (la 1° Guerra Mundial) a los judíos alemanes con “gas venenoso " ...

Así, vemos que ¡ Hitler no inventó nada !.

Incluso, el “Gran Héroe de la 1° Guerra Mundial” Ludendorff, consideró que la publicación de “Los Protocolos de los Sabios de Sión” era muy conveniente, ya que se necesitaba un “chivo expiatorio” al cual culpar por la derrota en la guerra submarina, que él había instigado irresponsablemente.

Incluso, pese a que ya había sido desenmascarada la falsedad de “Los Protocolos de los Sabios de Sión” , Ludendorff escribió :

“Con Francia e Inglaterra (países que derrotaron a Alemania en la 1° Guerra Mundial), trabajaba “codo a codo” la dirección del pueblo judío”.

“Es más, lo más probable es que los jefes judíos lideraban a franceses e ingleses ... “

La “Asociación contra la arrogancia del Judaísmo” (“Verband gegen die überhebung des Judentums”) de Ludwig Müller (quien publicó en alemán “Los Protocolos de los Sabios de Sión”), fue ampliamente elogiada.

“Desde la invención de la imprenta, e incluso desde la aparición de los caracteres, ningún libro ha aparecido, que cause tanta agitación en todos los niveles de la población alemana, desde los príncipes hasta la clase trabajadora”.

“Nosotros estamos alborozados de la aceptación que finalmente consiguió un hombre valiente, que ha encontrado la respuesta de una cuestión vital para la nación alemana”.

El éxito del libro antisemita fue realmente enorme : en unos pocos meses ya circulaban unos 120.000 ejemplares ...

Un testigo de esa época, de religión judía, opinó como un clarividente: “hasta los científicos alemanes han sido convencidos de la autenticidad del libro sobre los “sabios de sión” y creen en la existencia de una “conspiración judía mundial”.

“Dado que la gente educada de Alemania es la que más cree en ésta teoría, resulta hoy ya virtualmente imposible erradicarla ”.

“Ninguno de los más grandes intelectuales alemanes se ha puesto de pie para denunciar este fraude y cazar a quienes lo inventaron”.

El interés del público burgués en éstos temas no fue siempre igual de fuerte, pero jamás se extinguió totalmente.

Cuando Hitler tomó el poder en el año 1933, Beek publicó 33 nuevas ediciones traducidas al alemán (N. del T.: Gottfried Zur Beek = Ludwig Müller Von Hausen).

Theodor Fritsch, puso a la venta una “edición popular” de libro antisemita, vendiendo unos 100.000 ejemplares.

Además de las ediciones nombradas, apareció una extensa literatura de comentarios (acerca del libro), que incluyó al Jefe “ideólogo” Nazi Alfred Rosenberg.

“Los Protocolos de los Sabios de Sión” contribuyeron en una parte importante a la autoría intelectual de dos asesinatos políticos cometidos en Berlín (año 1922).

Schabelski-Bork había fundado poco después de su arribo a Berlín, una organización terrorista del tipo de la zarista “100 Negros”.

Él lideró un ataque, el 28/03/1922, a uno de los principales líderes de los inmigrantes rusos, Pavel Nikolayevich Miliukov.

Miliukov era Jefe del “Kadettenpartei" (Partido Cadete) y había recientemente emigrado desde Rusia como Vinberg, escapando de los Bolcheviques.

(N. del T.: El Partido Cadete quería convertir a Rusia en una “Monarquía Constitucional” como Inglaterra).

Éstos fanáticos, querían asesinar a ese político por considerarlo “demasiado moderado”.

El comando asesino, no encontró a Miliukov y sí a Vladimir Nabokov, el padre de quien (con el mismo nombre) después fue el famoso escritor (autor de “Lolita”) .

Schabelski-Bork fue castigado por ese crimen con 14 años de prisión, pero fue liberado mucho antes de terminar de cumplir su condena.

Por estar involucrado en dicho asesinato, Vinberg fue expulsado de Alemania.