Caen fuerte las ventas de autos usados y último modelo
Fue 10,73% y 8,28% respectivamente y contra el mismo mes del año anterior
Por Luis Ceriotto
Quejas por las altas tasas de los préstamos.
Uno a uno, todos los parámetros para medir el desempeño del sector automotor dieron para abajo durante abril.
Primero fueron los patentamientos, que son las ventas efectivamente concretadas en el mes y que cayeron 8,28% contra el mismo mes del año anterior.
También bajaron las ventas a concesionarias (-7,1%) , como se denomina en el sector automotriz al sector mayorista.
A la par, si bien mide más lo que sucede en Brasil que en las concesionarias locales, la producción de las terminales automotrices registró en abril un retroceso alarmante (-24,4%), en sintonía con la caída de las exportaciones (-27,9%), de las cuales casi 70% tienen como destino el mercado brasileño.
Ayer se conoció la estadística de venta de autos usados, que también arrojó una caída, en este caso del 10,73% , con 120.252 unidades.
Son datos de la Cámara de Comercio Automotor, basados en las transferencias de unidades usadas de los registros automotores. En lo que va del año, el nivel de ventas de vehículos usados es similar a igual período de 2011, con 553.426 unidades, que arroja una leve baja en el acumulado de enero a abril (-0,76%).
El mercado interno, hasta ahora, operó como refugio para las terminales automotrices, cuya producción comenzó a mermar levemente a fin de año, con la caída de la demanda desde Brasil.
Las fábricas comenzaron a explorar alternativas para incrementar sus exportaciones hacia México, Venezuela y Colombia. Y por supuesto echaron mano al mercado interno, que en 2011 se mantuvo firme de punta a punta, con un récord de 858.010 unidades.
Así, la participación de vehículos locales en las ventas de las concesionarias, tradicionalmente del 33%, subió a 39% en este último cuatrimestre.
Durante 2011, como también ocurrió en todos los demás renglones, la venta de autos usados alcanzó el récord de 1,8 millón de transacciones.
Sólo un 20% fue con créditos prendarios, el resto se hizo en efectivo o con créditos personales. Pero esa financiación ahora desapareció, según Príncipe. “La poca financiación que se ofrece es con tasas tan altas que realmente no tienen nada que ver con un país como el nuestro”, dijo.
(Fuente : Clarin.com)
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